En un pueblo idílico pero siniestro, se revelan los oscuros secretos de la industria que explota a los adolescentes problemáticos por beneficio económico. A través de las tensiones entre padres e hijos, se muestra el choque generacional y las consecuencias de una sociedad que no entiende las verdaderas necesidades de la juventud.
La serie sigue a Luke Roman, un agente inmobiliario que vende casas habitadas por entidades sobrenaturales. Para lograrlo, libera fantasmas o utiliza trucos como galletas recién horneadas, combinando lo cotidiano con lo paranormal.