Kirie Goshima y Shuichi Saito descubren que la ciudad de Kurōzu-cho está bajo una maldición relacionada con las espirales, que desatan una serie de horribles transformaciones y locura entre los habitantes. A medida que la obsesión con las espirales crece, la ciudad se sumerge en un caos aterrador e inescapable.
Yoshiki descubre que su mejor amigo Hikaru ha sido poseído por una entidad sobrenatural que amenaza con matarlo si no lo acepta, mientras el pueblo en el que viven se ve involucrado en extraños y caóticos sucesos. Enfrentado al miedo y la confusión, lucha por salvar su vínculo.
Kei Kurono muere junto a su compañero al intentar salvar a un hombre, pero ambos despiertan en una habitación con desconocidos y una extraña esfera negra. Obligados a participar en un violento juego de supervivencia, deberán luchar por su vida para tener una segunda oportunidad.