Serie USA del 2019, de una temporadas de ocho capitulos, de una duración media de 40 minutos por capitulo, con una valoración de 7/10, bajo dirección y guión de Jon Favreau, con un presupuesto de 100 millones.
Este spin-off que de entrada en su tráiler tenia una pinta atrayente, Por lo que incita interes ante una ajustada ambientación, muy al estilo trilogía original de Star Wars; con un Pedro Pascal que clavaba el papel protagonista; y una soundtrack de calidad, que no sonaba a refrito de John Williams.
The Mandalorian es muy recomendable no sólo como serie de Star Wars, sino como calidad serial en general.
Si nunca has visto nada de Star Wars, no es algo preocuoante, pues la historia es totalmente viable de la saga, construyendo su propia trama y protagonusta.
El mercenario Mandaloniano (Pedro Pascal) se adueña del papel y lo borda en cada escena aun sin la expresividad facial. Cabe destacar que estamos ante una interpretación con una dificultad añadida, pero con la habilidad de saber comunicar un rango considerable de emociones, aún llevando un casco impenetrable al espectador (ecepto en un instante en toda la película para jugar a romper el misterio)
La nueva serie de Star Wars, creada con el dullo de Jon Favreau, es un flashback a la trilogía original de la saga.
Ambientada en el universo Star Wars, en concreto pocos años después del Episodio VI de la saga. The Mandalorian cuenta la historia de Mando, un singular caza-recompensas, que viaja por la galaxia en busca de fortuna. Y en la que se ve arrastado por ser exposito, ante la historia del bebé Yoda en un vinculo emocional.
Por su parte la produccion, siendo la ambientación es otro de los valores que tiene esta serie. Decorados, Vestuario, Imágenes generadas por ordenador, etc. Todo encaja de manera natural obteniendo una gran calidad. Si tipo de genero hace que entre en el concepto de “neo western espacial”, con cazas recompensas de "se busca", sherif, cantinas, duelos, atracos, venganza, traiciones, busqueda de identidad, en un salvaje he infernal espacio sin ley ni orden, en el que es mas facil morir entre tiros y más tiros, que seguir vivo.
Desde la trilogía original, la serie lo sabe, y hace buena gala de ello en los episodios.
En cuanto a guiños para los fans de la saga, los detalles de incluir canon de las precuelas es un gesto inteligente, por parte de Favreau y compañía, para unificar en una misma historia las precuelas, con la trilogía original, creando una ambientación al viejo estilo Star Wars, con pinceladas de detalles.
Hay que hacer una parada en uno de los rasgos distintivos de esta serie, en el personaje de bebé Yoda. Sin duda la serie ha ganado popularidad gracias a este adorable pequeñín, que realmente tampoco es el centro de atención en cuanto a la narrativa. Esta no es la serie de bebé Yoda, pero sin duda es todo un acierto narrativo.
Este proceso inaginativo y productivo crear personajes, digno de elogio, es una muestra muestra con el que dedicación está hecha la serie. Así como en el bebé Yoda, se aprecia el mismo esfuerzo con otras criaturas, naves, planetas, etc.
Todo esto eleva la serie, a todo un mundo que muestra en que cimientos se asienta el guión del mandaloriano.
No obstante la trama pierde fuerza a medida que avanzan los capítulos. Los tres primeros ponen el listón muy alto, los tres siguientes juegan a subir y bajar ese listón, sin llegar a recuperar el nivel de los primeros. Por suerte, los dos últimos vuelven a ofrecer la mejor versión de la serie, y todo queda en una sensación de tiempo bien invertido, pero que se podría haber aprovechado mejor.
Más allá de los altibajos de calidad que pegan los capítulos, el principal aspecto negativo es que la serie repite su fórmula demasiado, las resoluciones de los conflictos se acaban volviendo un tanto predecible, y la emoción vivida al principio, se termina viendo diluida, por lo que pierde capacidad de sorprender, en una pauta creciente