Opiniones Hollywood

La nueva serie de Brian Murphy nos narra el ascenso de un joven grupo de artistas en los estudios Ace en la Hollywood de los años 40 y las peripecias de su proyecto de filmar una película en contra de las convenciones de la época.

Esta suerte de ucronía, con una buena reconstrucción y un tono que de a ratos emula al melodrama de la época, como suele suceder en las producciones yanquis esta ficción va mutando de su desenfado inicial a la bajada de línea machacona, con sus apuntes sobre la discriminación racial, la gaytud (reminiscente en ambientación a la Lejos del paraíso de Todd Haynes), cierto protofeminismo y su emprendedurismo con dólares, hacia una resolución que no pude interpretar como irónica como afirman algunos.

Los actores y actrices jóvenes aportan belleza, mientras que varios de los veteranos, solvencia actoral en personajes menos lineales, como Holland Taylor y su directora de casting Ellen Kincade (acaso lo mejor de la serie), Joe Mantello y su jefe de producción Dick Samuels, Jim Parsons notable en su temible e imprevisible representante Henry Willson, Dylan McDermott y su proxeneta Ernie West, una por momentos sobreactuada pero siempre glamorosa Patti LuPone en su Avis Amberg y una entrañable Mira Sorvino como la actriz Jeanne Crandall. Se suman a ellos a actores y actrices representando a figuras reales de la época.

Como ocurre muchas veces con Murphy, sus buenas intenciones e ideas adolecen de una cierta superficialidad en su abordaje, como si no pudiera contener la tontería.
La producción es deslumbrante y la banda sonora con temas de la época para la escenas "movidas", enfática e insoportable.

Hollywood es una historia alternativa sobre un elenco de luchadores, en su mayoría ficticios, que intentan triunfar en Los Ángeles en los años 40.

Casi todos los miembros del reparto que nos presentan - el escritor Archie Coleman (Jeremy Pope), el director Raymond Ainsley (Darren Criss), la actriz Camille Washington (Laura Harrier), entre otros - son de orígenes marginales.
Son, por designio, personas que nunca, jamás, habrían tenido una oportunidad en el Viejo Hollywood, al menos no sin encontrar alguna forma de pasar. Este es el primer objetivo del espectáculo: una reescritura de la trillada historia del sueño grande, pero una protagonizada por personas a las que no se les permitió formar parte de ella, pero que en esta, ganan...

Pero la serie no es sólo una fábula rosa sobre qué pasaría si... Hollywood también tiene la ambición de ser un correctivo muy necesario para nuestra visión demasiado simplista de lo que fue en su día.

Este Hollywood no fue para el consumo de masas, un "Dreamland" donde las grandes estrellas tenían conexiones arregladas por arregladores, que hacían negocios en el frente de una gasolinera y los actores, productores gay y bisexuales, secretamente hacían fiestas exclusivas donde ya no podían ser secretos.

Hollywood muestra su época mas turbia - la homofobia, el racismo y el sexismo que dejó fuera al talento marginado durante décadas - y sueña un nuevo sueño donde no fue suficiente para detener a nuestros héroes.

Pero su otro objetivo de desengañar a los espectadores del mito sano que encarnan las películas de la época se vuelve increíblemente desordenado rápidamente.

Parte del problema es que Hollywood no está completamente construido alrededor de personajes de ficción. Los nombres reales entran y salen del drama a lo largo de todo, desde Hattie McDaniel (Queen Latifah), hasta Anna May Wong (Michelle Krusiec), personas reales que hicieron el imposible para reforzar los egos de personajes que nunca existieron y por lo tanto, discutiblemente, sus creadores.

Luego está Henry Wilson(Jim Parsons), un agente de talentos de la vida real que fue famoso por desarrollar a los protagonistas de la época.
El era, como Hollywood deja excesivamente claro, el Harvey Weinstein de su época, coaccionando a los jóvenes a tener sexo a cambio de papeles y el estrellato. En el programa, uno de esos hombres es el aspirante a actor que Wilson convierte en Rock Hudson.

Es difícil no ver las ambiciones de Hollywood.
La verdad de su lado más desagradable, inspirada en la versión real de la historia, socava la seriedad de su deseo, haciéndola parecer empalagosa. A su vez, esa parte sincera del espectáculo hace que sus incursiones en los bajos fondos del mundo real del viejo Hollywood, parezcan baratas.
Hay demasiadas fricciones entre los dos para construir un todo cohesivo, y, como resultado, toda la empresa se ve comprometida en el mejor de los casos y condescendiente en el peor.

Como la mayoría de las personas involucradas en el Hollywood del mundo real, los personajes de Hollywood están totalmente convencidos de que todo lo que hacen es muy importante.

Hacen realidad los sueños, contando historias para que otros puedan verlas y se inspiren para creer que ellos también pueden hacerlo. Necesitamos tener una versión de esta historia en la que los marginados tengan éxito porque necesitamos que inspiren una versión futura más diversa de Hollywood,para que Hollywood pueda seguir adelante.

Pero la serie también quiere que sepan que representa un negocio en el que los abusadores prosperan, el sexo puede cambiarse por el poder y los hombres intolerantes pueden construir sistemas que protejan sus intereses y amplíen su alcance.

Eso es tan parte del negocio del espectáculo como el chico negro que se le mete en la cabeza que puede lograrlo, importa tanto como los blancos, y se convierte en un ejemplo que inspira a muchos otros en casa. Es revelador que mientras los personajes marginados de Hollywood encuentran el éxito, su mayor abusador es reformado ambiguamente, se le permite permanecer en el negocio de los sueños después de sólo unas pocas escenas de sentir lástima por todo ello.

Estas son dos caras de la misma moneda: el pernicioso alcance de los poderosos y las inspiradoras historias de éxito que lavan su reputación. Al atar los dos juntos una vez más, la serie apoya el viejo sistema que cree que la mayor producción de Hollywood, siempre ha sido Hollywood...

Estar dentro de la industria cinematográfica, en cualquier aspecto, desde guionistas, hasta actores, nuca va a ser un trabajo fácil, hay que abrirse camino y puede llegar a tener un alto costo, ¿Qué tanto de ti estás dispuesto a perder por cumplir un sueño?
Década de los 40’s
Década de los 40’s, uno de los mejores momentos en la época dorada, destacando directores como Raoul Walsh (Perseguido, 1947), John Brahm (Concierto Macabro, 1945) y Billy Wilder (La mundana, 1948).
Los avances tecnológicos eran usados a favor del sonido, la imagen, efectos especiales, todo lo que está detrás de escena para darnos una entrega que nos asombre y nos tenga firmes en el asiento.
Después de la guerra, algunos soldados iban a California a probar suerte y ver si conseguían un papel, era pasar horas frente a las puertas de los estudios para a veces solo lograr aparecer como un extra más. Algunos de los actores que probaron suerte y hoy tenemos la dicha de ver sus filmes fueron Charles Bronson (Doce del patíbulo, 1967), Kirk Douglas (Senderos de Gloria, 1957) y el inolvidable Clark Gable (Lo que el viento se llevó, 1939), todos ellos sirvieron a diferentes escuadrones durante la segunda guerra mundial.
En estos años también predominaba el racismo hacia la gente de color, homosexuales, latinos e incluso por ser mujer ya eras menos. Pertenecer a esos grupos era prácticamente tener un estilo de vida poco favorable, no ser candidato para buenas oportunidades laborales, que tu decisión fuera tomada en cuenta, entre otros.
Peg Entwistle
“Tengo miedo, soy una cobarde. Lamento todo lo ocurrido. Si hubiera hecho esto hace tiempo, habría ahorrado muchísimo dolor. P.E”
No se puede hablar de Hollywood sin conocer a la persona que inspiró esta serie: Peg Entwistle.
Ella es recordada por ser la trágica actriz que a los 24 años se suicidó desde la letra H de Hollywoodland, siendo un parteaguas del atractivo que tendría ese letrero para los residentes y turistas, convirtiéndolo hoy en día en un icono que representa al cine y usada en inumerables escenas icónicas.
Después de sufrir rechazo de directores y productores, cortar sus escenas en la entrega final de la película, estar al borde de la ruina económica y emocional la lleva a tomar una decisión trágica días antes de que le otorgaran un protagónico en una película donde, irónicamente, su situación la orilla al suicidio.
Hollywood. Ryan Murphy.
⚠⚠ADVERTENCIA. CONTIENE SPOILERS⚠⚠
Ryan Murphy se ha consolidado como uno de los showrunners más rentables para la industria de TV y Streaming. Desde su éxito en Glee (2009-2015), ha logrado crear series aclamadas por el publico y la crítica como es American Horror Story (2011-actual) y American Crime Story (2016-actual), donde ha dejado marca de que lo suyo es el lado oscuro de la historia.
El 1º de mayo se estrenó en Netflix la serie Hollywood, ambientada en 1945, cuenta la historia de diferentes personajes que buscan ganarse un nombre en Ace Studios. Jack Castello, Raymond Ainsley, Camille Washington y Archie Coleman tendrán que luchar contra prejuicios de la época y la misma hipocresía de los medios para sacar a pantalla grande su gran filme, Meg.
Jack Castello (David Corenswet), es un exsoldado que, al regresar de la guerra, busca cumplir su sueño de ser actor, inicia buscando opciones como extra cada día afuera de Ace Studios, pero es rechazado continuamente. El embarazo de su esposa es lo que le obliga a conseguir un trabajo y termina cayendo en una gasolinera manejada por Ernest "Ernie" West (Dylan McDermott), que se dedica no solo a dar mantenimiento a autos, sino también donde sus clientes pagan por ir a “Dreamland”, dan servicios sexuales “bajo las sombras”. Gracias a este trabajo es que consigue hacerse de contactos y tener la oportunidad de hacer pruebas para la pareja romántica de Peg (posterior Meg).
Camille Washington (Laura Harrier) es una actriz afroamericana, tiene un contrato con Ace Studios, pero los únicos papeles que le otorgan son de sirvienta torpe y graciosa, cuando se entera de la producción de Peg, le comenta a su esposo, el director Raymond Ainsley (Darren Criss), si podrá audicionar para conseguir un papel, sin embargo, por su color de piel conllevaría grandes problemas a la productora y con un numero grande de cines que no proyectarían la película para no sufrir las represalias del KKK. Cuando modifican un poco el guion, consigue que le den el protagónico y busca seguridad en Hattie McDaniel (Queen Latifah) ya que el camino para llegar a la alfombra roja no será fácil para alguien como ella.
Archie Coleman (Jeremy Pope), es el personaje que más tiene que perder en esta serie. Su desempeño como guionista se ve opacado por ser gay y negro, una combinación de más peligrosa en esa época, tiene que aceptar que quizá su nombre no aparezca en los créditos de la película que él escribió y que tiene que esconderse junto con su novio, Roy Fitzgerald / Rock Hudson (Jake Picking), que también es un aspirante al protagónico de Peg.
Ellen Kincaid (Holland Taylor) y Richard "Dick" Samuels (Joe Mantello) son ejecutivos del estudio que, contra todo pronóstico, lucharan y buscaran la manera de cambiar las reglas del juego, hacer algo que nadie más se pudo atrever a hacer en los años 40’s, ellos son los primeros en creer en el cambio para una mejor oportunidad para los involucrados, aun a sabiendas que tienen mucho que perder en el medio.
Avis Amberg (Patti LuPone) es esposa del director de Ace Studios, luego de que su esposo se incapacite por una enfermedad, es sobre ella que quedarán todas las decisiones de ahora en adelante. Dirigir un estudio no es cosa fácil para una mujer en esa época, sus decisiones son opacadas y reprimidas por “cuestiones legales” que es como intenta justificarlo el abogado. A lo largo de la serie deberá tomar las riendas y demostrar que pueden hacerse de grandes proyectos, correr riesgos y mantenerse firme ante las decisiones tomadas, vemos después de todo, que su logro no es minimizado.
Henry Willson (Jim Parsons), sirve para darnos cuenta de como es la situación en esa época, lo que tenías que pagar o ceder para ser una estrella y un talento, aunque esta basado en el real Henry Willson, muestra como realmente en la industria nada es gratis. Este personaje pasó a la historia por abusar de su poder y mover los hilos a favor de a quienes representaba, como lo fue Rock Hudson, nos hace ver la hipocresía de la gente y como un escandalo puede acabar con tu carrera profesional. Algo destacable en el personaje es como Jim Parsons logra deshacerse de la imagen ingenua que nos hicimos de él en The big bang theory como Sheldon Cooper, en Hollywood figura todo lo contrario y desenmascara el verdadero monstruo que se puede llegar a ser, vemos poco más de sus dotes que se originaron en teatro.
La combinación de estas actuaciones, los papeles que interpretan, su caracterización (siempre respetando el presupuesto, claro) y la correcta ambientación de la serie para reproducir de buena forma estos "años dorados", la pueden impulsar a ser una contendiente en las próximas entregas importantes para la Televisión lo cual sería un gran honor, un homenaje a aquellos que no tuvieron la oportunidad o el reconocimiento en su momento, meta principal de la serie de Murphy.
Hollywood se aventura a planearnos un “Que pasaría si…”, se arriesga y da crédito a todos esos actores a los que no le dieron su debido reconocimiento por su talento y no fueron valorados en esos momentos. Muestra la frialdad para tomar decisiones y todo lo que esconde una toma perfecta.
La motivación, romper los esquemas y ser uno mismo, son sólo algunos de los mensajes que encontraremos en Hollywood. Recordemos a esas estrellas que, por cambiar las reglas, su legado hoy brilla en la pantalla grande. Al final, esta serie nos hace plantearnos lo siguiente ¿Qué sería de la industria cinematográfica en nuestro presente, si las cosas hubieran sido diferentes?

Realmente es una serie muy buena, porque nos muestra un lado que realmente las personas de hoy en día no conocíamos de Hollywood, pensamos que siempre ha sido lo perfecto que nos muestran los demás Pero en realidad para haber logrado lo que hoy en día tenemos del cine se tuvieron que pasar por muchas cosas y esta serie lo demuestra como el racismo, la homofobia y el feminismo que es algo muy admirable que normalmente Ryan Murphy nos muestra en sus trabajos.