Situada la era Edo de Japón, la animación se centra en el guerrero Manji. Este, es un samurai que ha sido maldecido con una vida eterna y, para recuperar su capacidad de morir, debe asesinar a mil hombres malvados.
En el pasado, mató a cien samuráis, entre los que estaba el marido de su hermana, lo que provocó que una anciana le hiciese ser inmortal mediante la incorporación en su cuerpo de unos gusanos llamados ermitaños de la sangre. Sus poderes tienen gran potencia, pues le curan cualquier herida e incluso, le restaura miembros de su cuerpo amputados, dándole gran ventaja en las guerras. La muerte de su hermana le lleva a decidir matar a los 1000 hombres para redimirse.
En su camino hacia la mortalidad, Manji se cruza con la joven Rin Asano, y promete ayudarle a llevar a cabo la venganza por su familia, asesinada por un grupo de espadachines cuyo líder es Kagehisa Anotsu.