Una serie 2020 Colombiana de seis capítulos, de una media de 40 minutos, con una valoración Dr 7/10, bajo dirección y guión de Pablo Gonzalez.
En la que no se le puede negar la buena voluntad, y tan poco se puede negar el nivel que tiene el cine colombiano.
Un guión con muchas deficiencias en que mas, que un atraco en el que nos sorprenda con inteligencia y originalidad, es todo un cumulo de deficiencias y torpezas.
Habiendo sido anunciado como un hecho real, y denominado como el robo del siglo con 24 millones de pesos colombianos, del Banco Nacional de Valledupar, uno no se explica como se dibuja una banda de amiguetes de barrio, y como se planifica tan mediocremente, que mas bien parecen van atracar una sucursal de barrio, y no un banco custodiado por un batallón de militares. Un robo de chismorreo en la que ante una caja fuerte que no tienen ni idea, o una banda que se revela por dejarlo todo, y llevarse las monedas, o no tener pensado la numeración de los billetes, o como se va comprando la involucracion policial a golpe de escena
«A pesar de que fue un gran escándalo en Colombia y tuvo sus consecuencias, no fue un hecho realmente mediático, por lo que creo que la gente, incluso en el país, va a encontrar la historia fascinante», dice Parra, quien encarna a Chayo, un fracasado vendedor de joyas, que mantiene un lujoso estilo de vida con un segundo «empleo» como atracador.
Una serie que por hacerla lo mas corta posible, tiene una linea muy escueta llenado a lo concreto, por lo que ciertas escenas se hacen increíbles en la historia, pues genera subtramas descuidadas.
Una interpretación un tanto sobreactuada, y diálogos que para colombia sera muy autentico, pero que yo me perdía con el léxico.