The Pembrokeshire Murders, Los crímenes de Pembrokeshire en España, es una miniserie basada en hechos reales, concretamente en el asesino en serie galés John Cooper. En 2006, el Detective Steve Wilkins decidió reabrir dos casos de asesinato sin resolver de los años 80 conectados con una serie de robos.
Los nuevos avances en la tecnología en cuanto al análisis de la sangre y el ADN, los retratos robot y los informes de los testigos llevan a la policía de Dyfed-Powys a revisar un episodio de Bullseye en 1989, lo que los lleva al asesino en serie que es finalmente capturado.