De verdad quisiera darle más de 3.5 a la serie. Quisiera poderle dar un 5, porque me encantó. Magnífica la puesta a punto, con un ritmo caótico y apabullante que te hace sentirte dentro de la cocina con los personajes. Pero siento que tuvo sus fallos, que a mí, como guionista y amante del cine y las series, me dolieron por amor a The Bear.
Y éstos son: 1. confusión dramática al inicio de la segunda temporada. Aunque a inicios de la. primera temporada ya se muestra como una serie caótica ordenada, y eso le da su encanto, en la segunda ese caos se transporta a las historias, por lo que te cuesta entrar y conectarte con los personajes, porque te cuentan tanto y tan pronto que quedas sin saber qué pensar, y eso te frena, en vez de empujarte.
2. Los finales de temporada. Tanto en la primera como en la segunda temporada, el último es el peor capítulo, como si los guionistas no supieran cerrar las historias y acaban dando finales que de decepcionan al público, como si entrara (esto en el final de la primera, sin spoiler) la mano divina a salvar a los personajes. Claro, esto se entiende después como un empuje hacia lo que sería la segunda temporada, pero se siente como si ese final fuera sacado de la chistera.
Igual es una serie muy buena, que vale toda la pena ver!