Adictiva. Creo que es el mejor calificativo que se le puede conceder a una serie, y más aún si cuenta con 121 capítulos repartidos en 6 excitantes temporadas. Si tuviera que quedarme con algo, sería sin duda la lograda interacción entre personajes y espectador. Acabas sintiéndote parte de ese grupo de "amigos", deseando conocer New York y su famoso Upper East Side. Además, creo que es inevitable identificarse con algunos personajes de la serie, pese a sus imperdonables cotilleos y traiciones.
La figura de Blair Waldorf no deja indiferente a nadie, también su relación con Chuck Bass, un amor en primer lugar impredecible y que acaba siendo el verdadero drama de la serie. Personalmente, la temporada 4 y 5 adquieren un plus de calidad y dramatismo, principalmente por el inesperado amor surgido entre dos de los personajes más opuestos de la trama.
Si tuviera que cambiar algo, sin duda el final de la serie sería una de ellas. Es un final bastante esperado, menos por el hecho de descubrir quién es la famosa "reina cotilla". En cuanto al doblaje de algunos personajes (en idioma español) deja mucho que desear.
Para acabar, Gossip Girl es una serie para cualquier público dispuesto a acabar sumergiéndose, al completo, en una historia llena de realidades de un mundo totalmente paralelo como es el Upper East Side.