Morgan, una madre soltera de tres hijos con una inteligencia excepcional, trabaja como limpiadora en el departamento de policía para mantener a su familia. Durante uno de sus turnos nocturnos, mientras revisa las pruebas de un caso que lleva años sin resolverse, se da cuenta de que algunas pistas han sido mal interpretadas.
Con su mente analítica y detallista, decide reorganizar las pruebas de manera discreta, revelando nuevas conexiones que los investigadores habían pasado por alto.