Orestis es un músico que también organiza eventos musicales y le llega una oferta para organizar un festival de música en una isla. El reto es único por dos motivos: organizar el festival y poder vivir esa experiencia en un entorno paradisíaco. Motivado por Fanis, candidato a alcalde en la localidad, decide ir a la isla sin saber lo que le esperaba.
Orestis llega a su hogar temporal y atrae el interés de los lugareños, involucrándose rápidamente en su vida y sus historias. Se desarrolla un romance con Klelia, la hija de Fanis, pero la diferencia de edad y otros problemas complican la relación. Orestis también se enfrenta a las dificultades de los residentes, y debe encontrar la manera de reconciliarse con ellos y cerrar el festival en paz.