Phoebe Rook decide dejar su trabajo en un importante bufete de abogados para trabajar en un centro jurídico comunitario especializado en violencia familiar. Allí la joven conocerá las historias de diferentes mujeres cuyas vidas están marcadas por el sexismo y la opresión. Cuando el centro se ve amenazado por la retirada de financiación, Phoebe sentirá la necesidad de salvarlo, poniendo a prueba todas sus relaciones.