A los 15 años, Melissa Jesperson-Moore descubre que su padre, Keith Hunter Jesperson, es el infame asesino en serie conocido como el "Asesino de la Cara Feliz".
Este descubrimiento la arrastra a un mundo de confusión, mientras lucha por comprender cómo pudo haber crecido junto a un hombre capaz de tan atroces crímenes.