Puede que el dibujo no sea el mejor posible y que el argumento de los capítulos sea totalmente disparatado, pero precisamente por eso, es imposible no reírse en cada capítulo. Muy recomendable para pasar un buen rato. Capítulos para el recuerdo como cuando van a Francia, a España o el de la espada Excalibur son difíciles de superar.