Megan Hunt (Dana Delany) es una famosa experimentada neurocirujana que adora su profesión. Su carrera se ve truncada por un grave accidente de tráfico que le deja un molesto temblor en la mano como secuela y esto impide que pueda seguir operando. Sin embargo, aunque ya no puede salvar vidas, Megan quiere seguir trabajando así que decide aprovechar sus conocimientos de medicina y se convierte en forense.
La perseverancia en su trabajo y sus amplios conocimientos del cuerpo humano hacen que se convierta en toda una experta resolviendo crímenes. Su brillante reputación como cirujana la precede y para ella no existen límites a la hora de llegar hasta el final en sus investigaciones. Kate Murphy (Jeri Ryan), su jefa, siempre está de su parte, aunque intenta que la forense no meta la nariz donde no debe.
Junto a ella trabajan los detectives Bud Morris (John Carroll Lynch) y Samantha Baker (Sonja Sohn), a los que chocan sus particulares métodos, y su eterno compañero y confidente Peter Dunlap (Nicholas Bishop), con el que surge una irrefrenable atracción.