Antes de que un personaje determinado pueda llegar a robarse una función, ha de contar con un largo proceso a sus espaldas que le hayan hecho ser quien es. Bocetos, diseños primarios, autocrítica, un mínimo sentido común... todo puede influir en el origen de un gran personaje, sobre todo si éste no pertenece a la raza humana y ha de conseguir la empatía de la audiencia. En tales casos, el trabajo es doble.
Muchos personajes míticos de la historia del cine no habrían llegado a robarnos al corazón de no contar con gente sensata de por medio, empeñadas en corregir y en no dar cualquier versión por buena. De este modo conocimos a criaturas como Groot, E.T., Popeye, o el mismísimo monstruo de las galletas, y hoy, en SensaCine, vamos a recordar cómo eran sus primeras (y alocadas) encarnaciones. ¡Sigue leyendo!
El malvado Groot (Guardianes de la Galaxia, 2014)
Marvel se jugaba mucho con este film; tanto, que es posible que de no mediar el rotundo éxito de Los Vengadores, jamás habríamos conocido a ningún miembro de la tripulación de StarLord (Chris Pratt). Lo cual, de adaptar con suma fidelidad los cómics, quizás habría sido mejor. Por lo menos en el caso de Groot, ese adorable árbol viviente que dobló Vin Diesel en la versión original.
Y es que, en las viñetas -concretamente las de la colección Cuentos Asombrosos-, Groot no sólo hablaba con total fluidez, sino que era un ente alienígena de muy malas pulgas con la intención de gobernar la Tierra. Una vez en nuestro planeta demostraba tener el poder de controlar las plantas, como una especie de Magneto verdoso, y tras muchos sudores conseguía ser derrotado... por culpa de una plaga de termitas. En serio. No nos podemos imaginar por qué James Gunn no quiso ni oír hablar de esta versión.