El terror es un género que se ha ganado el corazón y los miedos de muchos y muchas. Seguro que tienes algún título que ya te está rondando la cabeza y que supuso una sesión de grandes sustos y gritos. Quizá, incluso, no pudiste ni dormir en la soledad de tu habitación con la luz apagada después de ver esa película. Puede que hasta te aguantastes las ganas de ir al baño por la noche por no tener que cruzar un pasillo lleno de sombras extrañas.
Las mejores películas de animación de todos los tiemposEn honor a esas experiencias, en SensaCine hemos preparado una lista con las 30 mejores películas de terror de culto. Una serie de filmes no tan conocidos por el gran público que harán las delicias de cualquiera con ganas de descubrir joyas escondidas dentro del género.
LAS MEJORES PELÍCULAS DE TERROR DE CULTO - PUESTO 30: ‘LA CASA DEL DIABLO’ (2009)
Una noche con eclipse lunar la joven Samantha -magnífica Jocelin Donahue, capaz de aguantar todo el suspense del film prácticamente sola- acepta hacer de niñera de una anciana en una mansión alejada de la ciudad. El realizador norteamericano Ti West sitúa la acción en los años 80, rehuyendo la nostalgia y haciéndose suya la estética, casi de VHS, de la época. El éxito de La casa del diablo radica en su capacidad para estirar el suspense, prácticamente, como el mejor Polanski o como siempre hacía Hitchcock, con una cocción lenta de todos los elementos inquietantes que acabarán por reventar en la cara del espectador en sus increíbles momentos finales.
LAS MEJORES PELÍCULAS DE TERROR DE CULTO - PUESTO 29: ‘LOS CRÍMENES DEL MUSEO DE CERA’ (1953)
Lanzada como la gran primera película en 3D en color de un estudio -de hecho, la película tiene insólitos momentos acrobáticos con personajes lanzando objetos a cámara, incluyendo la cabeza en cera de Charles Bronson (que da vida al mudo Igor)-, lo marciano del asunto es que su director, el enorme André De Toth -recordemos, director de uno de los mejores wésterns de la historia: El día de los forajidos (1959)-, era tuerto, por lo que él la tridimensionalidad, directamente, no la veía. Eso hizo que el cineasta diera lo mejor de sí mismo en el cuerpo terrorífico de Los crímenes del museo de cera: donde vemos cómo Vincent Price da vida a un artista enloquecido desfigurado que quiere crear un museo de cera de los horrores usando como modelos… a sus propias víctimas asesinadas.
LAS MEJORES PELÍCULAS DE TERROR DE CULTO - PUESTO 28: ‘MIL GRITOS TIENE LA NOCHE’ (1982)
Primer 'slasher' acreditado de la cinematografía patria, la película de Juan Piquer Simón, pieza clave del fantaterror ibérico, es un filme rico en casquería y hemoglobina a chorro, donde la inventiva y el ingenio del cineasta para serpentear un guión de lo más esquemático, le lleva a dotarlo tanto de pinceladas 'giallo' como de la carnaza 'exploit' más tronchante. Desde los hachazos de un niño a su madre castrense hasta los desmembramientos de las jóvenes estudiantes a golpes de motosierra, Mil gritos tiene la noche se sacude todo tipo de complejos para abrazar el jolgorio a modo de picadora de carne púber femenina. El humor y amor gore del Supersonic Piquer tiene su punto álgido en el último segundo de la película. Con un par de huevos.
LAS MEJORES PELÍCULAS DE TERROR DE CULTO - PUESTO 27: ‘DRACULA: PAGES FROM A VIRGIN'S DIARY’ (2002)
Aún recuerdo los abucheos de la prensa cuando Guy Maddin se llevó el premio a Mejor Película en el Festival de Sitges 2002. La incomprensión instantánea de las futuras 'cult movies'. También abuchearon en Cannes en su día a Pulp Fiction o a La aventura de Antonioni. Pero no hay pataleta que pueda con películas como Dracula: Pages From a Virgin’s Diary, donde Guy Maddin adapta a Bram Stoker por la vía del músical clásico y el cine mudo en su vertiente más expresionista. Murnau, Lang, Sternberg, Powell & Pressburger, todos ellos se dan la mano en esta delicia fílmica, bañada por la música de Gustav Mahler y donde Maddin ofrece un baño de talento, cultura, sentido y sensibilidad.
LAS MEJORES PELÍCULAS DE TERROR DE CULTO - PUESTO 26: ‘SATANÁS’ (1934)
Uno de los títulos clave de las películas de terror de la Universal, Satanás está basado muy libremente (de hecho, no se parece en nada y Ulmer admitió que era más un reclamo que otra cosa) en el relato de Edgar Allan Poe El gato negro. El cineasta austro-húngaro prolijo en la Serie B norteamericana Edgar G. Ulmer, juntó para ella a las dos mayores estrellas del cine de terror del momento: Bela Lugosi y Boris Karloff, Drácula y Frankenstein. Película estilizadamente expresionista, con viejas amantes embalsamadas, un castillo con cadáveres en sus cimientos y misa satánica incluída, es un sorprendente relato sobre traición y necrofilia que acabaría influenciando a otras infinitas cintas de culto.
LAS MEJORES PELÍCULAS DE TERROR DE CULTO - PUESTO 25: ‘SOLO CONTRA TODOS’ (1998)
Entre El extranjero de Albert Camus y un concepto necrótico de la epifanía Bressoniana se encuadra el primer largometraje del cineasta argentino Gaspar Noé. Una cruda muestra de “existencialismo negro”, según sus propias palabras, con un protagonista infame -al que da vida de forma categórica Philippe Nahon, muerto este mismo año-, una náusea sartriana continua que sueña con ser carnicero pero lo que logra al final es una carnicería. Con una omnipresente y gutural voz en off que, más que acompañar, vomita sobre las imágenes, Solo contra todos se descubre como un escupitajo a cualquier tipo de ética humana, una caries en el horror que es pura deglución fruto del aislamiento, la misantropía y la violencia interna que acaba por florecer de la forma más podrida posible.
LAS MEJORES PELÍCULAS DE TERROR DE CULTO - PUESTO 24: ‘HAUSU’ (1977)
Todo fan de las casas encantadas tiene obligada parada en esta obra de culto del terror nipón que, aún hoy, 40 años después de su estreno, sigue siendo una chifladura carnavalesca en toda regla. De hecho, Hausu -del director Nobuhiko Ôbayashi-, que cuenta como siete dulces jóvenes estudiantes van siendo engullidas una tras otra por una (¡divertidísima!) casa maldita, bien siendo devoradas por un piano, bien mordidas en el culo por una cabeza decapitada, en el fondo parece la suma de las pesadillas de una niña con hiperactividad cerebral, capaz de imaginar formas que, incluso en su ingenua tosquedad, poseen una rapidez y una efervescencia por los FX animados que ni las películas de The Beatles, y funcionan a la perfección tanto por la vía cómica como por la terrorífica.
LAS MEJORES PELÍCULAS DE TERROR DE CULTO - PUESTO 23: ‘ALUCARDA, LA HIJA DE LAS TINIEBLAS’ (1977)
Tina Romero y Susana Kamini dan vida a Alucarda -recordemos: anagrama de Drácula- y Justine -cómo habría disfrutado esta película el Marqués de Sade-, dos jóvenes novicias entregadas a la herejía, el fornicio y, finalmente, la posesión satánica en esta cinta de culto del cineasta mexicano, muy reivindicado por Guillermo del Toro, Juan López Moctezuma. La historia de amor, lascivia y paganismo -Alucarda, las hijas de las tinieblas es de un erotismo sangriento y diabólico de caerte los ojos- de las jóvenes tiene su punto álgido en un aquelarre final donde la locura acaba devorando a la razón. Los muy fans, deberían asomarse al documental Alucardos. Retrato de un vampiro (2010), de Ulises Guzmán.
LAS MEJORES PELÍCULAS DE TERROR DE CULTO - PUESTO 22: ‘AL MORIR LA NOCHE’ (1945)
Película surgida de los estudios Ealing, el principal motor de comedias en Gran Bretaña en los años 40 y 50 -Robert Hamer dirigió Ocho sentencias de muerte (1949) y Charles Crichton es el director de Oro en barras (1951), por ejemplo-, Al morir la noche es en realidad una película de relatos fantásticos surgidas del mismo tronco argumental: espejos vampíricos, marionetas asesinas y niños fantasmas pueblan un filme en estructura circular a la que tampoco le falta el imprescindible humor british marca de la casa. Esta película, por cierto, le encantaba a Luis Buñuel.
LAS MEJORES PELÍCULAS DE TERROR DE CULTO - PUESTO 21: ‘LA MÁSCARA DE LA MUERTE ROJA’ (1964)
De todas las películas del ciclo que el cineasta norteamericano Roger Corman dedicó a adaptar a Edgar Allan Poe -los completistas no deberían perderse La caída de la Casa Usher(1960) o Historias de terror (1962)-, La máscara de la muerte roja me parece la más lúdica y deshinibida. Vincent Price se lo pasa pirata dando vida al Príncipe Próspero, mientras proclama su devoción por Satán y se pasea de sala de vicio en sala de vicio, cada una con un color chillón y un vicio distinto. El relato de Poe resulta tristemente adecuado para los tiempos que vivimos los mortales del Siglo XXI: el de una peste que mata todo lo que toca, con el Príncipe y sus nobles y patéticos invitados atrincherados en el castillo celebrando bacanal tras bacanal, mientras la muerte roja juega a las cartas con el destino de la humanidad.
LAS MEJORES PELÍCULAS DE TERROR DE CULTO - PUESTO 20: ‘GOZU’ (2003)
Si tradujeramos explícitamente el título japonés de la cinta el resultado sería algo así como “Teatro del horror yakuza: Cabeza de Vaca”. Miike repite con Sakichi Sato, guionista del 'superhit' Ichi the killer (2001), para cruzar una carrolliana locura mezcla del cine de yakuzas y el terror más surrealista sin olvidar, claro, su siempre macabro sentido del humor. En Gozu se repite la acción infalible en el género de la llegada de un hombre a una ciudad infierno, donde el terror ancestral -Gozu, la deidad sintoísta mitad hombre mitad buey- desequilibra la realidad plagándola de goteras de leche materna, lavanderías de secado de piel tatuada yakuza y transubstanciación de géneros sexuales. La receta Miike cruzaría fascinación, terror, estupor y carcajadas loquísimas, como bien prueba el gag de la estimulación prostática con un cazo sopero. No. Lo. Hagáis. En. Casa.
