Star Wars, Episode VII - The Force Awakens, es muy divertida, tanto para fans como para público general, ofreciendo un producto nostálgico y fiel a la franquicia.
Antes que nada, debo aclarar algo: no son fan acérrimo de esta historia. De entre toda la franquicia, la película más familiar para mí es La amenaza fantasma (1999). Sin embargo, a nivel general le reconozco su valor e importancia a la saga. Después de haber visto algunos de los episodios, en vivo o animados, tuve cierta idea de lo que este universo presentaba y proponía a las audiencias. Incluso recibí la oportunidad de disfrutar de La Guerra de los Clones, cuya primera y segunda partes se pueden ver y disfrutar en VHS, DVD y Youtube.
La franquicia de Star Wars, de George Lucas y la distribuidora Lucas Film, es con seguridad una de las más queridas del público desde mucho tiempo atrás, tanto por sus alegorías políticas, morales, como por las aventuras que presenta. Y es que después de que los admiradores disfrutaran de las secuelas estrenadas por allá en el 2002 con Hayden Chrystensen y Natalie Portman en el estelar, las expectativas fueron totales con JJ Abrams anunciando la eventual entrega para este 2015, después de su excelso trabajo en Star Trek: En la oscuridad (2013).
Aun cuando no soy ese admirador loco por presentarse en la premiere y disfrutar de la aventura, sí admito, después de ver la cinta, que JJ Abrams realizó un muy buen trabajo con el Episodio 7, ya que logró construir una historia disfrutable, muy entretenida y porque simultáneamente retoma los elementos que me parecen son los más esenciales de la franquicia, combinándolos con un toque de modernidad, adecuado para dar la bienvenida a las nuevas generaciones. Me reí en no menos de cinco ocasiones y cuando la función terminó sonreí. Así de buena está.
La música de John Williams, por lo menos la partitura más conocida, sólo aparece al principio, y aunque en el resto de la cinta sí encontramos piezas interesantes, no sentí que éstas generaran la emoción esperada en los avances previos. Mención aparte es la introducción, tan característica de las películas. Esta parte de la edición es absolutamente necesaria.
Hasta donde pude notar, la historia, en términos generales, se define así: Un stormtrooper que forma parte de la Nueva Orden -la referencia nazi u "opresora" en este universo- y que busca desesperadamente un objeto misterioso, se encuentra en una masacre y termina rescatando a un prisionero y huyendo. Así es como eventualmente conoce a una chatarrera llamada Rey (Daisy Ridley) y juntos se embarcan en la protección del misterioso objeto, el cual resulta ser un mapa que puede tener la clave para encontrar al "mítico" Luke Skywalker.
Ahí dejo la explicación. Probablemente los fans más puristas tengan dudas en la construcción de un guión que más parece copia del Episodio IV, aunque esto no es del todo un aspecto negativo que resaltar, ya que tanto la historia como las actuaciones del trío protagónico son buenas y empáticas. Quienes ya la vieron puede complementar lo que aquí expongo, quienes no la hayan visto aún -cuestión poco probable- pueden leer esta sinopsis sin arruinarse la trama, porque precisamente se trata de disfrutarla plenamente. Por el lado de la ya mencionada nostalgia, tenemos -o mejor dicho, los fans tienen- el espectacular regreso de Harrison Ford como Han Solo y Chewbacca con sus clásicos gestos, elementos que se agradece haberlos incluido aquí. Esto incluye a C-3PO.
En este sentido, además de que la "fuerza va despertando", como el título sugiere a manera de reboot, también son notorias las subtramas, como es la situación del hijo de Han y Leia, Kylo Ren, quien se encuentra en el lado oscuro y brindando un formidable personaje interpretado por Adam Driver. Por un lado tenemos esta narrativa, que contribuye al desarrollo de personajes, agudas escenas de acción, batallas láser, y por el otro la búsqueda de Riley con su yo interior en la Fuerza, el dilema ético del stormtrooper y las ocurrencias tanto de BB8 como de Chewbacca que harán reír a todos en la sala. Aplaudibles las batallas, los montajes y locaciones, además de los bien realizados efectos especiales, dando a entender la elaborada tarea en que Abrams se metió en el proceso de la edición para que ésta estuviera bien cuidada en el proceso de post-producción. Después de más de un año de preparación, sentir el producto tan bien cuidado se agradece.
Damas y caballeros, Star Wars está de vuelta con Episode VII The Force Awakens y lista para abrirse a nuevas generaciones que sin duda amarán la historia.