"Collision Course" Supera Las Bajas Expectativas
Los animales prehistóricos mas exitosos del cine animado regresan por quinta vez a la pantalla grande, ahora, el fin del mundo es su gran preocupación.
"Collision Course" es titulada la ultima aventura de la franquicia mas contumaz del cine animado - en referencia a los ingresos en taquilla -. Lo que empezó como un conmovedor y familiar episodio hace mas de una década, ha evolucionado de manera admirable, aunque no siempre con resultados satisfactorios. La quinta entrega abre con un procaz pero entretenido prologo centrado en los interminables percances que padece nuestra ardilla dientes de sable, Scrat (Chris Wedge), percances que lo terminan llevando al espacio exterior, un lugar aparentemente seguro, sin embargo, Scrat continua su osadía originando irreflexivamente un choque de mundos, proyectando millones de meteoros morados al planeta tierra, cuestionando la vida de todos los animales.
Indiscutiblemente, Scrat es la insignia de Blue Sky, lo que es Buzz Lightyear o Nemo para Pixar. Sin importar la frecuencia de sus apariciones, siempre mantiene su esencia descabellada y estimulante en cada acto y sin él, no seria posible ninguna película mas dentro de la saga. Los guionistas y escritores han descubierto la joya en bruto que estuvo oculto desde el 2002, un pequeño e irritante animal, enfocando cada giro argumental como consecuencia de los hechos ejecutados por la ardilla, un punto a favor. "Ice Age" aun tiene futuro e incluso con Pixar ("Finding Dory") y Illumination (“The Secret Life of Pets”) al acecho, Many, Diego y Sid atesoran altas posibilidades de continuar con la buena racha en taquilla, al menos, eso parece.
El destino de los prehistóricos mamíferos ha sido relativamente bueno, y parece que todos (con excepciones) viven en parejas. Manny (Ray Romano) y Ellie (Queen Latifah) afrontan la rápida madurez de su hija Peaches (Keke Palmer), quien se encuentra en un tipo de relación sentimental junto a Julian (Adam Devine). Una sub-trama nada original y muy predecible, ya que Julian no congenia con Manny, pero sí congenia con los demás, desatando la envidia y celos del mammut, y por si existe alguien tan ingenuo, tiene un final feliz. Nada novedoso!. Diego (Denis Leary) y Shira (Jennifer Lopez), los dientes de sable, obtienen papeles secundarios y su tono se desvanece por momentos, ademas, los escritores dan pistas de una posible cría entre estos dos tigres en una escena, algo que seguiría llevando por mal camino a la franquicia. Tal vez, deberían replantearse spin-offs sobre algún personaje en especifico, para no maltratar mas a los personajes generacionales. Sid (John Leguizamo) aún permanece en un desequilibrio emocional, algo por lo que lo amamos, gran parte de la comicidad es centrada en este lindo animal que nos seguiría produciendo carcajadas toda la vida. Las zarigüeyas, Crash (Seann William Scott) y Eddie (Josh Peck) siguen siendo objetos cómicos utilizados para el humor del filme. Buck (Simon Pegg), la estrella de "Ice Age: Dawn of the Dinosaurs" es exasperante, engorroso y tosco, sus chistes y excentricidades no divirtieron ni siquiera a los niños, un personaje que debe ser eliminado de inmediato. A pesar de esto, es él quien pronostica la catástrofe, y es él quien atrae a nuevos, humillantes y pobres villanos, mas relleno innecesario para la historia.
Con la seriedad de un cataclismo y personajes tan ocurrentes, Mike Thurmeier y Galen T. Chu recrean un equilibrio entre la comedia y el drama, desequilibrándose brevemente por culpa de Buck. Aún queda espacio para momentos únicos e incluso memorables, pero en una época en donde es dificil encontrar propuestas interesantes, "Collision Course" consigue salir bien librada, a pesar de su reutilizada trama. Las enseñanzas también están presentes, la aceptación de un padre a la madurez de su hija, la independencia de un joven, los errores de la sobreproteccion y el trabajo en familia son algunas de las lecciones que la película quiere predicar.
Los paisajes sonoros no tocan la espectacularidad visual que ha sido regenerada con el pasar de los años, sin embargo logran las pretensiones que se proponían. Tonalidades del purpura de los bólidos, las texturas de los reptiles y mamiferos, efectos del cielo, el brillo de Geotopia y mas detalles abren espacio en un lugar privilegiado para posicionarse como una agradable adición al mundo animado. La agregación de personajes novatos es hostigante y ninguno logra cumplir lo que promete, por lo cual deja en desnivel a la muy probable próxima secuela. Queremos seguir viendo que es capaz de brindar esa era de hielo que una vez nos estremeció, esos personajes que todavía no merecen extinguirse.