La serie empezó con unas tres primeras temporadas impecables, la cuarta temporada estuvo sobresaliente, la quinta estuvo bastante bien pero, a partir de la sexta (con la dirección de Eric Wallace), fue un desastre caótico e injustificado, carente de sentido y con ausencia de trama para el protagonista, Flash, que es al que todo el mundo quiere ver. Esto es debido al abuso de los "Deus ex machina", al "poder del amor/amistad", las resoluciones carentes de explicación, la ausencia de personajes principales (no solo de la serie, sino del Arrowverse también en la última temporada), las tramas aburridas, los episodios de relleno, la pérdida de valor que tiene la muerte de un personaje (pues si la trama lo requiere lo traerán de vuelta y, a ser posible, de una manera totalmente chapucera), los malos efectos especiales (que al principio no eran así), las tramas y capitulos dedicados a personajes secundarios (que, casualmente, coinciden con los personajes que el propio director inventó) y alguna cosa me dejaré. Sin duda esto ha pasado por la falta de atención que se le dio a los fans de la serie que, de haber sido escuchados y tenidos en cuenta, no estarían tan decepcionados con el final tan lamentable que ha tenido. La mayor parte de la culpa se la lleva Eric Wallace, de eso no hay duda, sin embargo, lo preocupante es que hay gente que dio luz verde a que sus ideas fueran plasmadas en la serie.
Si alguien me pregunta le diré que la serie de Flash es de las mejores series respecto a sus primeras temporadas, pero que acaba siendo destrozada conforme avanza, por ello no hay mejor recomendación que terminar la serie con el final de la tercera temporada que es bastante cerrado y, si bien no es el mejor final que podrian haber hecho, es el mejor final que tiene la serie. Y para sincerarme de manera completamente sincera y desde el respeto, no le desearía a nadie que Eric wallace se pusiera a cargo de su serie favorita, es más, pienso que la decepción generalizada de la serie por parte de los fans es tal, que debería dar unas disculpas sinceras en público, en especial a los fans y a Grant Gustin, actor que, a pesar de la pésima dirección que tuvo la trayectoria final de la serie siempre ofreció un Flash lleno de sentimiento y con una actuación de diez.