La llegada de La Revuelta a RTVE ha revolucionado la televisión. Y no solo por la polémica que surgió alrededor del fichaje de David Broncano y compañía por la cadena pública. La nueva Resistencia ha conseguido algo que parecía imposible: hacer la competencia a El Hormiguero, llegando arrebatarle el liderazgo del 'access prime time' en dos días de los cuatro que emiten ambos. Sin embargo, también ha quedado demostrado el gran problema del formato de Pablo Motos.
Tras anotar su mejor inicio de temporada, El Hormiguero comenzó la semana enfrentándose a un nuevo escenario con la llegada de La Revuelta a La 1. Su arma secreta fue la primera entrevista en televisión de Victoria Federica, sobrina de Felipe VI, pero ni con esas consiguió que Broncano superará las expectativas con su debut en la cadena pública. El buen estreno de la nueva Resistencia (17,1% y 2.152.000 espectadores) fue una anécdota de lo que estaba por venir: en la segunda y tercera emisión superó en estricta coincidencia al programa de Antena 3.
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No obstante, El Hormiguero cierra la semana como líder del jueves, 12 de septiembre, al anotar un asombroso 23,3% de 'share' y y 3.107.000 espectadores con la visita de Lamine Yamal. La entrevista al jugador del Barcelona se convierte en la mejor cuota del programa desde el 28 de junio de 2023 cuando se firmó el récord del formato (25,9% con Feijóo) y su entrega más seguida desde el 16 de marzo de 2023 (3.522.000), día en el que después se emitió el bote de Rafa Castaño en Pasapalabra.
A pesar de la buena acogida de La Revuelta, el espacio de Motos continuó con unos buenos resultados gracias en gran parte a los trucos que ha utilizado para no perder el liderazgo en el 'access prime time'. De hecho, ha promediado su mejor semana histórica de cuota de pantalla al registrar un 20,5%. Algo que se debe en gran parte a las dos cifras obtenidas en las entrevistas a Victoria Federica y Lamine Yamal, y aquí esta el problema al que se enfrenta El Hormiguero.
Los invitados son clave para 'El Hormiguero', pero un problema también
Con la primera semana de "duelo" en el 'access prime time' terminada queda claro una cosa: El Hormiguero depende de sus invitados para obtener muy buenos resultados. Si bien es cierto que con la visitas de Javier Cámara el martes y de los 'coaches' de La Voz el miércoles anotó un aceptable dato, las entrevista a Victoria Federica y a Lamine Yamal le han hecho disparar el 'share'. De esta forma, el programa de Motos ha pasado pasado de un 23,3% a un 17,5% dependiendo del entrevistado, es decir, una diferencia de casi 6 puntos.
Está claro que el invitado es clave para todo programa de televisión, pero esta primera semana de "duelo" también demuestra que La Revuelta depende de sí mismo para conquistar a los espectadores. Los entrevistados por Broncano en RTVE esta semana han sido: Aitor Francesena, un surfista ciego español ganador ganador; la actriz Najwa Nimri; al escritor Juan José Millás y al antropólogo Juan Luis Arsuaga; y el actor y director Raúl Cimas, quien fue invitado "in extremis" al lesionarse el que iba a acudir.
De hecho, y a diferencia de El Hormiguero, Broncano y compañía no avisan de quienes serán sus invitados de la semana. Y ni siquiera en el mismo día como hacían durante La Resistencia. El público se entera en el mismo momento de la emisión de quién será el entrevistado, por lo que el espectador que ha puesto en su tele La 1 lo hace por ver el programa. Además, los invitados suelen sen "personajes" desconocidos para la audiencia (y más en la televisión convencional).
Habrá que ver qué pasa las próximas semanas con las audiencias del 'access prime time'. Puede que la buena acogida de La Revuelta se diluya, y todo haya sido un espejismo, o puede que siga arrasando entre los espectadores. Eso sí, lo que también ha quedado claro es que El Hormiguero puede convivir con Broncano sin bajar de los dos millones de espectadores.
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