Con MasterChef Celebrity 9 aún emitiéndose en La1, la versión de anónimos ya busca a sus próximos aspirantes. El casting se ha abierto por lo que los más cocinitas de cada casa afilan sus cuchillos para presentarse. Si juegas bien tus cartas, puedes acabar muy bien posicionado, ya sea como 'influencer' o contratado en uno de los decenas de restaurantes que tienen contacto con el programa de RTVE. Pero cuando empezó a emitirse en 2013 no estaba muy claro qué iban a conseguir los concursantes al acabar las grabaciones.
El primer ganador de este experimento fue Juan Manuel Sánchez Reche, un almeriense que trabajaba como camarero y que decidió apuntarse al concurso empujado por su hermano Félix. Ha llovido mucho desde que se alzase con el premio aquel 2 de julio de 2013. 100.000€ que le cambiaron la vida, pero han tenido que pasar 10 años para que su sueño de abrir un restaurante por fin funcione viento en popa.
En esa primera edición de MasterChef todos eran mucho más inocentes. Ahora parece que todos están más familiarizados con el lenguaje audiovisual y se desenvuelven ante las cámaras con total naturalidad, pero en aquella época eran más celosos de su vida personal y no dejaban que su verdadera identidad saliera a la luz. Al menos, no como en las últimas ediciones.
En cualquier caso, Juan Manuel siempre destacó por ser un duro trabajador y por su humildad. Creció en Albox, un pueblo de la comarca del Valle del Almanzora al que siempre quiso volver con su propio negocio. Llegó al programa con tan solo 25 años, unos años después del fallecimiento de su padre, a quien perdió en 2009. Este hecho truncó su sueño de estudiar cocina porque tuvo que ponerse a trabajar para llevar dinero a casa, pero entrar en MasterChef le dio la oportunidad de su vida.
Para la final, Juan Manuel y su compañera duelista, Eva M. Millán, idearon un menú que presentaron ante Ferrán Adriá. Él eligió un carpaccio de vieiras como entrante, un bacalao al pil pil con pisto de verduras como plato principal y un tartar de fresas con pétalos de rosa para el postre. Así se hizo con 100.000€ y un hueco para estudiar en la prestigiosa escuela Cordon Bleu.
Sus primeros pasos como cocinero profesional
En marzo de 2014, tras terminar el programa, estuvo un año y 3 meses en el restaurante Pristino del Hotel El Real de Agua Amarga en Níjar (Almería). Después pasó a preparar eventos en hoteles de República Dominicana, Londres e Ibiza, algo que le mantuvo ocupado al menos 5 años. Por encima de todo, lo que ha hecho tras hacerse conocido gracias en MasterChef ha sido trabajar en eventos de 'show cooking', conferencias, asesoramiento... Todo esto le ha llevado a abrir, por fin, su restaurante propio, pero eligió el peor momento para ello.
En 2020 abrió la Taberna Topares en su Albox natal. Tras la pandemia provocada por el coronavirus, el sector hostelero se paralizó por completo, por lo que su restaurante fue una de las víctimas. Lo mantuvo cerrado durante un tiempo, pero ahora vuelve a estar en funcionamiento y a pleno rendimiento.
La comida es tradicional con mucho sabor mediterráneo. La carta se compone, fundamentalmente, de productos de la zona, como pescados, mojama o la huerta murciana. Tiene pocos platos, pero las reseñas aseguran que vale la pena la visita.
"Sitio con mucho encanto", dice una crítica en TripAdvisor de febrero de 2022, "Ha sido una muy grata sorpresa descubrir este restaurante. La comida de una calidad excelente, el trato inmejorable y cuidado de muchísimos detalles. Muy recomendable relación calidad precio. ¡Me ha encantado!".
Previo a la taberna ya había regentado la Pastelería Obrador JM, también en Albox, donde vendía tartas de milhojas con macarons, tartas de queso con crema de mango o donuts azucarados preparados en el mismo local. Lo cerró permanentemente para poder centrarse en su restaurante que, tras un primer bache, parece estar en su mejor momento.