Como no hay dos sin tres, en 2017 llegó a los cines la tercera entrega de Cars. A diferencia de las dos entregas anteriores, en esta ocasión John Lasseter no se sentó en la silla del director. Su lugar lo ocupó Brian Fee, quién supo llevar a la gran pantalla la genial historia guionizada por Bob Peterson y Mike Rich. Una historia que devolvía a la franquicia esa esencia que destilaba la cinta original, con la que consiguió que miles de niños se convirtieran en fans de Rayo McQueen.
El siete veces campeón de la Copa Pistón se niega a asumir que el día de su retirada está cada vez más cerca. Pero la llega a los circuitos de Jackson Storm, le hace replantearse las cosas y tras sufrir un accidente en la última carrera, intentando vencer a toda costa a su nuevo rival, está a punto de tirar la toalla. Todo cambia cuando conoce a la entrenadora Cruz Ramirez, quien le anima a que se prepare para el próximo campeonato. McQueen, Ramirez y sus inseparables amigos recorren Estados Unidos en una aventura que cambiará sus vidas para siempre.
