Ashwinder
Los basiliscos y Nagini no son las únicas serpientes que aterrorizan a los personajes de Harry Potter. La Ashwinder es una serpiente delgada, de color verde pálido y con ojos rojos. Este espécimen se crea a partir del fuego mágico y dejan tras de sí un rastro de cenizas al arrastrarse. La Ashwinder vive sólo una hora y utiliza su poco tiempo para encontrar un lugar oscuro el que poner sus huevos y desintegrarse en forma de polvo. Para acabar con ellas sólo hay que seguir su rastro de ceniza hasta localizar el nido y utilizar un encantamiento para congelar a sus futuras crías. Una vez hecho, los huevos pueden usarse para pociones amorosas.