Es bien sabido por todos que Keanu Reeves es un ser de luz, pero la asistencia del que sin duda es uno de los actores más queridos de Hollywood a una de las proyecciones de Kill Bill: Volumen 1 acabó siendo el detonante de una salida de tono de Quentin Tarantino sobre su desdén hacia el cada vez más habitual uso del CGI. No sabemos si Keanu llegó a enterarse de lo que estaba pasando, pero el cineasta contó la anécdota en una entrevista con Empire en 2003, coincidiendo con el estreno de la segunda parte de su película, Kill Bill: Volumen 2.
Veinte años después nos damos cuenta que lo que entonces ya estaba comenzando a sacar a Tarantino de sus casillas estaba absolutamente en pañales respecto a lo que vendría después, pero el genuino cineasta se daba cuenta de que el éxito de películas como Matrix o Star Wars a finales de los 90 y primeros 2000 llevarían a los estudios a apostar cada vez más por el uso de estás técnicas, dejando cada vez más a un lado el cine tradicional, un oficio que para él es pura artesanía.
Tarantino nunca ha escondido sentir un absoluto respeto por Matrix, la primera película de la saga de ciencia ficción de las hermanas Wachowski, y, de hecho, incluso llegó a situarla en su top de películas modernas. Sin embargo, no ocurrió lo mismo con las secuelas, que le decepcionaron por completo: "Hubo una época en la que hubiera considerado Matrix oficialmente mi número dos, tras Battle Royale. Sin embargo, tengo que decir que eso fue antes de que salieran Matrix 2 y 3 y arruinaran la mitología para mí", contó en su día para un vídeo sobre sus películas favoritas. "Simplemente no puedo pensar en ella como antes. Pero aunque arruinase la mitología y he movido la Matrix original más abajo en mi lista, no la borro por completo. Todavía tiene que estar en mi Top 20".
La decepción de Tarantino saldría a la luz de forma inesperada durante la citada proyección de Kill Bill: Volumen 1. El cineasta había invitado al también Luc Besson y a Keanu Reeves a una proyección de la película y, mientras observaba al actor viéndola, no podía dejar de pensar en Matrix y se fue enojando poco a poco.
Vi a Keanu viéndola y de repente lo sentí. ¿Sabéis? Mis chicos son todos reales. No hay ordenadores jodiendo alrededor. Estoy harto de toda esa mierda. Esto es vieja escuela con putas cámaras
"Si quisiera hacer toda esa mierda de juegos con ordenadores hubiera ido a mi casa a meter la po**a en mi Nintendo. Estas tonterías CGI son la sentencia de muerte del cine. Las películas son demasiado caras en este momento y están acabando con la maldita forma de arte. Tal como están las cosas, dentro de diez años será oficialmente asesinado", sentenció.
No podemos evitar preguntarnos si se lo dijo directamente a Keanu y, como ser de luz que es, nunca ha comentado nada al respecto, o si simplemente comenzó a farfullar en la sala de cine.
