Supervivientes es el 'reality' más extremo de la televisión. Las condiciones climáticas, el hambre y el aislamiento hacen mella en los famosos que viajan hasta Honduras. Los concursantes se embarcan en esta aventura con la ilusión de participar en el formato estrella de Telecinco, pero no todos lo acaban viviendo de la misma forma. En todas las ediciones, algún superviviente ha intentado irse antes de lo esperado del concurso, o incluso han llegado a abandonar a pesar de la multa económica. Y este año no iba a ser menos.
Arkano comenzó Supervivientes 2024 lleno de energía y con la idea de que podría afrontar la experiencia sin hacer demasiados esfuerzos. Sin embargo, el hambre y el aislamiento provocaron que intentará abandonar en una ocasión. Un hecho que no llegó a convertirse en realidad y que acabó con el conocido rapero llegando a la final, quedando en cuarto puesto. 103 días que le pasaron factura y ha contado en el podcast El sentido de la birra.
"Nos trataban muy mal, pero así consiguen el punto de desesperación", comenzó a relatar Arkano su experiencia en Supervivientes 2024 a Ricardo Moya, presentador del podcast. El rapero confesó que no había ni trampa ni cartón en el aspecto de la supervivencia, algo que chacó con lo que él tenía en mente. "Yo iba con esa misma idea en la cabeza. En mis mejores sueños era como que llegaba las 20:00 de la tarde y decían: 'Fin del rodaje, vamos al hotel'. No fue así, no había lo más mínimo", señaló.
Arkano recalcó que "se pasa muchísima hambre" y que aceptó el reto al ver a otros concursantes de otras ediciones. "Yo veía los personajes que habían ido y digo: 'Pues si han podido, yo también'", explicó, llegando a poner como ejemplo a Rosa Benito. No se dio cuenta de la dureza del 'reality' hasta que no al llegó a Cayos Cochinos: "Cuando empezó el concurso y vi un poco el rollo pensé que iba a durar nada y menos". Y es que el concurso es para él un "infierno".
Estar en 'Supervivientes' es vivir un infierno diario, desde que te despiertas
"Las horas pasan muy lento, no tienes nada para huir de ahí. Es un espacio muy limitado. Hubo un día que a mí me petó la cabeza y tuve un ataque de ansiedad. Empecé a llorar y me quería ir", explicó sobre el momento en el que activó el protocolo de abandono, que al final no activo. Pero el hambre y el aislamiento no fue lo único malo para Arkana, también el convivir con personas desconocidas. "Estás 24 horas al día compartiendo un trozo de coco con gente que la mayoría te cae mal...", afirmó.
A pesar de todo lo malo, Arkano también considera Supervivientes como una "bendición". La ayuda de los psicólogos fue clave para que no abandonará. "Fíjate cómo estaba mi cabeza que yo lo único que pensaba era que cuando saliera de allí, me tomaría una cerveza, a pesar de que es algo que llevo trabajando años", comentó el rapero en relación a sus adiciones del pasado, algo que trabajó también en Honduras.
"Me han obligado a la fuerza a estar cuatro meses solo en un sitio conviviendo con gente con ayuda psicológica tratando un tema muy importante para mi y labrándome un camino sobre el que he salido muy reforzado", sentenció Arkano en el citado podcast.
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