De un tiempo a esta parte, la noción de "plano secuencia" ha ido acogiendo popularidad en los círculos cinéfilos, convirtiéndose tanto en la máxima proeza visual como en una garantía para gritar a los cuatro vientos que tal director es, automáticamente, un gran director. De hecho, este tipo de planos continuados en los que sucede todo tipo de acciones ha conseguido tal fama que cada vez más realizadores se animan a cultivarlo, e incluso ha habido algunos, como los mexicanos Alfonso Cuarón y Alejandro G. Iñárritu, que han hecho del plano secuencia una firma de estilo.
Sin embargo, esta técnica comenzó a despuntar ya a mediados del siglo pasado, gracias a nombres tan míticos como los de Orson Welles o Alfred Hitchcock. El plano secuencia, por tanto, ha estado presente durante la mayor parte de la historia del cine, y hoy en SensaCine vamos a elegir los mejores que hemos visto nunca. ¡Empecemos!
Sed de mal (Orson Welles, 1958)
Orson Welles no hizo demasiadas películas, pero el puñado resultante le bastó para revolucionar el medio a cada paso. Si ya creó escuela con Ciudadano Kane, con la algo más tardía Sed de mal se lució desde el principio. Este 'thriller' daba inicio con la cámara siguiendo el recorrido de una bomba desde que era activada hasta que hacía explosión, una toma de tremenda dificultad técnica que dejo sin palabras a crítica y público.